lunes, 28 de noviembre de 2011

Tinga, lodge de lujo en Kruger

Parque nacional Kruger, Sudáfrica

Una de las nueve espectaculares habitaciones del Naringa lodge.
En Sudáfrica, y concretamente en el parque nacional Kruger, se encuentran algunos de los alojamientos más exclusivos del continente. Me detengo en esta ocasión en Tinga, un exquisito lodge al más puro estilo africano. Presume de trato servicial y muy lujoso. La última noche el personal te prepara una cena romántica con velas en la terraza privada de la habitación. Lo mejor de este lodge es su habitación de enormes proporciones y comodidades. Una de las más lujosas del continente africano. El cuarto de baño tiene una bañera con un ventanal que mira al río para darse un relajante baño ¡con unas vistas que quitan el hipo! La enorme terraza solarium privada cuenta con una piscina exterior al aire libre de ensueño, donde uno puede pasar horas y horas tomando el sol prismático en mano entre safari y safari.

Los enormes ventanales y terraza de la habitación dan vista a las orillas del río Sabie, donde es fácil ver manadas de elefantes que se acercan a beber. El enclave posee la mayor concentración de leopardos en África.

Para echar un buen rato junto a la piscina a la espera de la llegada de los elefantes...


El complejo se compone de dos lodges independientes: Tinga Safari y Tinga Legends, de 9 habitaciones cada uno. Ambos lodges están separados unos 10 minutos en coche y situados en el sector Skukuza de Kruger.


En uno de los 4x4 privados del lodge.



Las habitaciones del lodge están bien separadas para mantener la intimidad de los huéspedes en todo momento.

La cocina es muy buena y el alojamiento es en todo incluido. Otro de los momentos inolvidables en el trato del personal del hotel es durante los safaris, pues siempre hacen una parada para tomar una copa en miradores o sitios románticos. Está incluido en el precio y avisando antes, no faltará en el coche la bebida favorita para brindar al atardecer.

Piscina del Tinga lodge.


Además, al estar situado dentro del parque nacional pueden realizar recorridos nocturnos de camino de regreso de un safari al lodge en busca de leopardos ayudados de focos. Otro lujo.

Un lodge para hacer safaris a cuerpo de rey y sin duda uno de los mejores lodges en los que he estado.

La bañera invita a hacer un safari sin salir del agua...


Estas son mis valoraciones:

Situación: 9
Accesos: 7
Tranquilidad: 9
Arquitectura: 8
Ambiente: 9
Habitaciones: 10
Zonas comunes: 8
Gastronomía: 8
Servicio: 9
Servicio guías: 9
Integración Naturaleza: 9


Valoración general: 9

web del lodge.
El parque nacional Kruger es uno de los pocos que permiten realizar safaris en vehículos privados con la seguridad que siempre ofrece el asfalto de las carreteras que cruzan este enorme parque nacional. Aquí os dejo un enlace por si queréis alquilar coches en Sudáfrica.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Más que playas en Zanzíbar



Cuando uno llega a Zanzíbar, en la costa de Tanzania, lo hace generalmente atraído por sus playas. Un altísimo porcentaje de visitantes sin mayor pretensión que un buen hotel y una buena playa –esto último abunda en la isla- en la que tomar el sol y descansar.

Zanzíbar tiene muchos más alicientes que los que esbozo en el primer párrafo. Por ejemplo Stone Town, la capital, está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Tiene un pasado histórico tristemente vinculado a la esclavitud pero también está vinculado al comercio de especias y es la cuna del kiswahili, la lengua que hoy se habla en Kenia y Tanzania. De Zanzíbar partían la mayoría de las expediciones que los grandes exploradores europeos emprendían en el continente africano. Mi querido Livingstone entre ellos, claro está. Aquí se formaban, se aprovisionaban, y de aquí salían las caravanas que se internaban en el hostil territorio maasai.



Desde el punto de vista natural, la isla cuenta con un patrimonio interesante protegido en diferentes parques y reservas marítimas y terrestres en el Archipiélago. Sólo aquí es posible contemplar por ejemplo los colobos rojos.

No me resistí a coger un kayak de mar para conocer el arrecife de coral y practicar snorkeling entre los corales del que está considerado uno de los arrecifes coralinos mejor conservados del mundo. Barracudas, sérioles, wahoos, peces arrecifales de todos los tamaños y colores entre gorgonias y madreporitos espectaculares. Los anillos de coral que rodean las islas de Pemba y Unguja, son impresionantes. Es aconsejable contratar una excursión de las muchas que se ofrecen para bucear, hacer snorkeling, etc. También flysurf… pero eso ya es otra cosa.

No dudéis en guardaros un día para ir a la Reserva natural del Bosque de Jozani, donde podréis observar los endémicos colobos rojos en este pequeño reducto selvático. Por cierto aunque se cree ya extinguido, se piensa todavía habita en la isla una especie autóctona de pequeño leopardo. Cruzad los dedos en vuestro paseo a ver si dais con él…

jueves, 24 de noviembre de 2011

Los macacos del Atlas

Una de las actividades favoritas en su comportamiento gregario.

Bosque de cedros sin monos hay en otros lugares del medio Atlas y monos sin cedros también, pero desde Azrou se accede cómodamente al parque nacional D’Ifrane, donde crece un magnífico bosque de cedros (tal y como os mostraba en el pasado post) habitados por los macacos del Atlas.



Al sur de Meknés, la propia carretera de Azrou en dirección a Midelt cruza el corazón del bosque de cedros. A una decena de kilómetros de Azrou el asfalto llega al centro de interpretación y visitantes del parque nacional. Es el sitio indicado si queremos ver monos con garantías, pues algunos grupos familiares acuden a diario al lugar para llevarse a la boca los cacahuetes y demás bocados que los habitantes locales y los turistas desgraciadamente han instaurado como costumbre en este punto. Digo desgraciadamente porque la dependencia humana alimenticia es siempre una mala jugada para los hábitos de la fauna salvaje. Son monos salvajes, cierto, pero acostumbrados a la “ayuda” humana.

Los más pequeños y jóvenes todavía ramonean en busca de piñas de los cedros y bellotas de algunas de las encinas y robles de la zona. Son omnívoros, así que comen frutos, hojas e incluso insectos.

Sin abandonar por completo la seguridad del bosque salen a los claros en busca de sol.



Bastante más atractiva parece la idea de adentrarme en el bosque en busca de monos salvajes del Atlas. Existen infinidad de senderos y basta con alejarse un poco para toparse con familias de macacos en su quehacer diario. Es curioso ver cómo a primera hora de la mañana bajan de los árboles hacia los claros o zonas abiertas del bosque en busca de los rayos del sol que calienten un poco su cuerpo. Se sientan literalmente a tomar el sol en una simpática postura más humana que primate. Por la tarde, ya saciados, cada vez van quedando menos monos, pues se internan en el bosque en busca de algo de intimidad.

Un macho saliendo del bosque de cedros.



Los macacos del Atlas (macacos de Berbería) o singe magot (Macaca sylvanus) son una especie endémica del norte de África. La única especie del género Macaca presente fuera de Asia. En Marruecos encuentran su hábitat en las montañas del Atlas y sierras vecinas como el Antiatlas o el medio Atlas. Son monos cercopitecos de tamaño pequeño-medio de comportamiento gregario matriarcal que viven en manadas de 10-30 individuos.

Se quedan inmóviles tomando el sol...


Como animales gregarios que son, se organizan en grupos y en ocasiones las disputas por el alimento entre los machos dominantes de diferentes familias pueden ser crueles. La ley del más fuerte. Los respectivos jefes familiares secundados por sus escuderos más fornidos protagonizan auténticas disputas familiares en este fantástico bosque de cedros.

Una cría en busca de piñas.

martes, 22 de noviembre de 2011

Los cedros del Atlas

Interior del bosque de cedros.

Las montañas del parque nacional D’Ifrane albergan uno de los mejores bosques de cedro del Atlas en Marruecos. Probablemente el mejor y más extenso. No en vano está considerado como el mayor bosque de cedro del Atlas del mundo. Esta especie endémica del norte de África posee en la provincia de Ifrane la cuarta parte de su población mundial.



El Cedrus atlantica es nativo de las montañas de Argelia y en Marruecos está presente en el Atlas Medio, el Rif y en puntos muy localizados del Alto Atlas.

El árbol alcanza un porte 30-35 metros y en ocasiones hasta los 50 metros. Está presente en alturas cercanas a los 2.300 metros con ejemplares aislados y forma bosques muy densos en alturas en torno a los 1.600-1.800 metros de altura –donde encuentra su franja idónea a pesar de que crece a partir de 1.350 metros-. Bosques que pueden ser puros o mezclados con abetos argelinos, robles, encinas y arces. En el parque nacional D’Ifrane está presente en todas sus variedades de bosque y cuenta con ejemplares muy longevos –milenarios- y espectaculares como el célebre cedro Gouraud.


Cedros del Atlas y abetos Argelinos.

Uno de sus moradores más famoso es el endémico macaco del Atlas, que se alimenta de sus hojas y de las piñas (conos femeninos).

Desde el Centro de Visitantes (en la carretera de Azrou a Timahdite) un sendero fantástico se adentra en el bosque a través de la antigua pista (actualmente asfaltada pero muy estrecha y encantadora) que conduce hacia Aïn Leuh, el bosque de Ain Khela y el lago Afennouir. Un recorrido circular de día entero. La ruta ofrece innumerables oportunidades de salirse del camino y caminar por el corazón del bosque. En ocasiones la altura de los árboles es tremenda. También el perímetro de los troncos, que puede alcanzar los 12 metros. Por unos momentos, desde el interior del bosque, parece hacerse de noche debido a su frondosidad, especialmente cuando convive con robles y encinas. Incluso grandes acebos.

Son árboles de gran porte, hasta 50 m.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Las iguanas marinas de las islas Galápagos

Las iguanas marinas son uno de los valores naturales más importantes de Galápagos.


Tras una odisea por medio mundo, el Beagle atracaba en las costas de las islas Galápagos. Lo que iba a ser una parada más en su periplo viajero alrededor del mundo iba a convertirse en un antes y después en la biología. Un cambio en el planteamiento, la filosofía y la mentalidad sobre la evolución.

Tras un mes circunnavegando el archipiélago ecuatoriano, Charles Darwin decidió desembarcar junto a Covington, Byone y dos marineros para acampar una semana en la playa de la isla de San Salvador y allí cambió su vida para siempre. Según sus palabras: “Aquí, tanto en el espacio como en el tiempo, tenemos la sensación de que estamos algo más cerca de ese gran acontecimiento –ese misterio de los misterios-, que es la aparición de los nuevos seres sobre la Tierra”. Coincido plenamente con él. Nada más poner mis pies en las islas Galápagos sentí que estaba en otro mundo, en un cuento donde la naturaleza se muestra como tal, con especies que parecen de otro tiempo, que no se asustan por nada y que encuentran el hábitat ideal en estas islas cuya máxima belleza radica en la rareza. Las Galápagos o islas encantadas son diferentes al resto de lugares que he visitado. Un lugar único en todos los sentidos.


Enorme macho de iguana en Santa Fé.

Aunque el despegue de la teoría de la evolución lo basó Darwin en los pinzones que habitaban las islas, todo empezó en realidad cuando observó seres hasta la fecha desconocidos y según él, antediluvianos. Tortugas gigantes, cormoranes sin alas, y unos "seres con aspecto de dragones, más negros que la lava", y que no dudó en bautizar como “diablillos de las tinieblas”. Eran en realidad iguanas marinas y las podían ver bucear, sumergirse durante largos periodos de tiempo e incluso comer las algas del fondo marino a través del agua cristalina. Las había a millares, como también sus hermanas terrestres, que no tocaban el agua.

Aunque tardó un tiempo en plasmarlo en papel y publicarlo en El Origen de las Especies, lo observado durante esa semana en la playa de San Salvador rompió para siempre los esquemas de la biología.

Iguana terrestre.


Las iguanas marinas (Amblyrhynchus cristatus) son uno de los mayores atractivos del parque nacional de las islas Galápagos. Son más grandes que sus parientes las iguanas terrestres con las que sólo hibrida –constituyendo individuos estériles y de corta esperanza de vida- en la isla Plaza sur. Las iguanas marinas alcanzan hasta 1 metro y medio y presentan diferentes subespecies, de diferentes tamaños, en las islas Isabela, Santa Cruz, Fernandina, San Cristóbal, Santiago, Pinta, Genovesa, Gardner y Española.

Grupo de iguanas marinas en La Española.


Las iguanas terrestres presentan en cambio dos especies diferentes (Conolophus subcristatus) de hasta 1 metro de longitud y distribuida a lo largo de todo el archipiélago y la iguana galapagueña (Conolophus pallidus), exclusiva de la isla Santa Fé, y que puede alcanzar el metro y veinte centímetros. Durante los paseos fotográficos por las islas las inofensivas iguanas se cruzan y detienen en el camino, ajenas a cualquier peligro y dejándose fotografiar a nuestro antojo.

En pocos lugares he tenido la sensación de paz, de calma, que he percibido en estas islas y gracias a este científico puse mis sueños en este lugar. Thank you Mr. Darwin.

viernes, 18 de noviembre de 2011

El Yunque, la gran selva de Puerto Rico

Helechos gigantes en El Yunque.

En las faldas de las montañas portorriqueñas del Luquillo, en el extremo noreste de la isla de Puerto Rico, crece un bosque tropical de extraordinaria riqueza. Se llama El Yunque y forma parte de la red de Bosques Nacionales de EEUU., el único bosque tropical lluvioso que existe en este sistema de bosques norteamericano. Es el bosque más pequeño y el más diverso de la red.

Es el único bosque tropical de USA


En sus 113,32 kilómetros cuadrados alberga una gran biodiversidad, inherente a los bosques tropicales, y acrecentada por un alto número de endemismos de flora y fauna dada la condición insular de Puerto Rico.

Bromelias epífitas.



El Yunque, reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad está perfectamente acondicionado para el uso público. No en vano es uno de los principales atractivos para turistas y locales que acuden a esta selva en busca de alguna de sus preciosas cascadas o para dar un paseo entre altos árboles (posee 240 especie de árboles de las cuales 88 son endémicas o raras y 23 sólo crecen aquí) repletos de bromelias y 50 especies de orquídeas. Incluso hongos fluorescentes. Esto me recuerda la espectacular bahía fluorescente o bioluminiscente de Fajardo, al sur de la isla. Si tenéis ocasión no dejéis de daros un baño nocturno en sus aguas rodeado de millones de partículas bioluminiscentes.

En El Yunque crecen 240 especies de árboles repartidas en 4 tipos de bosque.



En función de la catena altitudinal encontramos en el yunque hasta 4 asociaciones vegetales diferentes, es decir cuatro tipos de bosque: bosque de Tabonuco, bosque de Palo Colorado, bosque de Palma de Sierra y el Bosque Enano. El piso superior, en el pico Toro (1.076 metros, máxima altura de El Yunque) alberga una interesente comunidad de vegetación enana. Es el llamado bosque Enano de El Yunque. Por el contrario, otra de las especies características de El Yunque son los helechos gigantes (Cyathea arborea). El Yunque cuenta con 150 especies de helechos.

Aunque su especie más representativa no es una planta sino unas ranitas arbóreas: las Coquís.

De gran relevancia es también otro animal, la cotorra de Puerto Rico.

Entre la fauna se han citado 120 especies de vertebrados (11 de ellas de murciélagos), una veintena de reptiles, un buen número de anfibios (12 especies de coqui), así como 66 especies de aves.




Cuenta con un centro de visitantes en El Portal, a la entrada del bosque, donde os recomiendo hacer una parada para informaros de todas las posibilidades que ofrece este espacio natural protegido, sus atractivos y la red de senderos para todas las dificultades que lo transitan.

Entre los lugares de mayor belleza se encuentran diferentes cascadas: La Mina, La Coca, Juan Diego, etc. y pozas como la de Bano Grande.

Se permite el baño en diferentes cascadas.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Cráteres Silvestres del Etna


Los cráteres silvestres son parada obligada en la visita al volcán Etna. Son referencia por encontrarse a apenas 500 metros del refugio Sapienza. El citado refugio es la base para la subida al cráter del volcán. Mejor dicho a parte del grupo de los cráteres del sur. A la cota 2.900 metros de altitud.

Junto al refugio está la estación del funicular y frente al refugio, al otro lado de la carretera, una procesión de tiendas y restaurantes. Una larga recta de la carretera lleva hasta el conjunto de cráteres.



Los cráteres se encuentran a 1.986 metros de altitud y llaman la atención por sus formas de cono perfecto con cráteres circulares asolados en algunas zonas por la erupción de julio de 2001. Existe una serie de senderos que suben hasta la cima de los cráteres e incluso se adentran por su interior. Algunos de estos senderos son simples asomos, muy accesibles para todo el mundo, de forma que será raro poder disfrutar en solitario de la belleza que no obstante tienen estos edificios volcánicos.

Seguramente la fotografía más buscada y preciada es la alfombra de flores que crecen en primavera y verano en las laderas del volcán hasta los 2.100-2.200 metros de altitud. Un toque de color rosa espectacular entre en un suelo de piroclastos multicolores, con dominancia del rojo y el negro.

La belleza de la estampa se refuerza con la presencia de la parte superior del Etna como cercano telón de fondo.

Abundan los endemismos florales, más importantes cuanta mayor altura (saponaria, artemisia, violeta del Etna, etc.).

Maestro del camuflaje.


Los cráteres son visita obligada e incluso objetivo único para muchos visitantes que deciden no acometer la subida en funicular sino tener un contacto cara a cara con el lapilli sin pasar de los 2.000 metros de altitud.

martes, 15 de noviembre de 2011

Subida al cráter del Etna, una experiencia volcánica de altura

Parque Regional del Etna

Cráteres del grupo sur del Etna. El volcán posee más de 200 cráteres.


Este post es parte del relatado en mi blog de Grandes Rutas, dentro del periplo viajero de ecotouring por el norte de Sicilia. Allí explico, por ejemplo, por qué no dejar para el último día de estancia en la isla italiana la visita al volcán. También por qué no estoy muy de acuerdo con el slogan comercial que utilizan en la isla para vender la excursión al “volcán activo más alto de Europa”.

No obstante os cuento a continuación algunos apuntes para disfrutar de esta experiencia de altura que tuve ocasión de disfrutar, casi (una pena), con erupción incluida.

Floración a 2.300 metros de altitud.



Existen diferentes accesos para llegar hasta el punto de partida de las excursiones habituales para ir al cráter del volcán Etna, que se yergue poderoso con sus 3.323 metros de altitud, en el noreste de Sicilia. Desde Taormina, el más directo y cómodo es el que sube por la carretera de la falda este desde Zafferana Etnea hasta el refugio Sapienza (1.900 m), en la cara sur del volcán. Desde Catania se llega por la carretera sur, que enlaza con la anterior unos kilómetros antes de llegar al volcán.

Las fumarolas son una constante en el paseo a pie por la zona superior.



En cualquier caso el refugio es el centro neurálgico de la visita al Etna. Aquí se encuentra la estación del funicular que sube hasta los 2.500 m (25,50 euros ida y vuelta). Una vez arriba existe la oportunidad (28,30 euros, niños 21,30 euros) de tomar uno de los vehículos 4x4 que suben hasta el refugio de la Torre del Filósofo (2.920 m.), que de letras y filosofía sabía bastante pero de ubicación de refugios poco, pues quedó sepultado tras una erupción…). Se va acompañado obligatoriamente de un guía alpino que en grupos reducidos explicará mediante un breve paseo por algunos de los cráteres sur, los principales aspectos vulcanológicos del Etna. Por cierto, si el día está despejado lo que tendréis frente a vosotros en el horizonte será la isla de Malta. La Torre del Filósofo está al pie del cráter superior pero es el último punto accesible a pie.

Así quedó el refugio tras la erupción.


A lo largo de esta caminata sin dificultad pero que transcurre en torno a los 3.000 metros de altitud, se pasa por el borde de un par de volcanes bastante espectaculares donde es posible ver desde zonas bastante calentitas (basta con ver el humo que sale del suelo) hasta zonas donde se almacena nieve durante todo el año. Zonas de contrastes en un volcán de contrastes. Las panorámicas son excepcionales en un ambiente volcánico sublime, entre cráteres activos con fumarolas y la posibilidad de caminar entre el lapilli multicolor con abundantes zonas rojas expuestas a la oxidación.
Piroclasto de tamaño medio con gran oxidación.



Pero la visita como tal no comienza aquí arriba sino ya en los accesos al refugio y en el propio teleférico. A lo largo de la subida en el funicular pasamos por encima de las impresionantes coladas de lava procedentes de las erupciones de 1983, 1985, 2001, 2002, 2003, y durante la subida en 4x4 y en el paseo a pie desde la Torre del Filósofo por las de 2002 y 2003. Llama la atención de la existencia de flores en un paisaje calcinado. Abundan los endemismos florales, más importantes cuanta mayor altura (saponaria, artemisia, violeta del Etna, etc.). Especialmente bella resulta la floración en los cráteres silvestres, donde me detendré en el próximo post.


La permanente columna de humo es bien visible desde cualquier punto.



El Etna, en contra de lo que se pueda pensar, no posee un solo cráter sino ¡más de 200 cráteres! Algunos de los más activos son el grupo de los cráteres sur, donde me encuentro. Otros forman los cráteres centrales y los del grupo del noreste.

Otras zonas relevantes del Etna con cráteres inactivos son el valle del Bove (erupción 1974) y los conos del monte Rossi (erupción 1969).

Aquí os dejo el enlace de una empresa que ofrece rutas a pie por el parque del Etna visitando buena parte de ellos.

Los camiones 4x4 llevan al visitante hasta el pie de los cráteres sur, al fondo.


A modo de shuttle, los camiones 4x4 van subiendo y bajando visitantes a medida que se llenan. De regreso a la estación superior del funicular, me detengo a contemplar las impresionantes fotografías de las constantes y más recientes erupciones del Etna (2001, 2004, 2006, 2008, etc.) que se exponen en la segunda planta del edificio y que ponen los pelos de punta. Podemos afirmar sin equivocarnos que cada pocas semanas el Etna hecha lava al exterior por alguna de sus bocas. La semana pasada, sin ir más lejos.


Bordeando uno de los cráteres superiores en las inmediaciones de la Torre del Filósofo.



La subida relatada la realicé el 29 de agosto de 2011 y noté que el Etna había aumentado bastante desde la  mañana su emisión de “humo”. A las 5 de la madrugada en la noche del 29 al 30 de agosto, unas horas después de haber bajado del volcán, el Etna entró en erupción expulsando lava durante casi 24 horas. Las imágenes salieron en todos los informativos del mundo y aquí os dejo las que emitió TVE.






Recomendaciones: un consejo importante a la hora de visitar el Etna: madrugar. Es el lugar turístico más visitado de la isla (con la consiguiente aglomeración de autobuses), y además las fumarolas que expulsa se condensan a medida que el día avanza y se forma una gran nube que termina por ocultar el sol. Mejor madrugar pues y estar arriba pronto.

Respecto a la indumentaria llevar siempre calzado de montaña y ropa de abrigo.


sábado, 12 de noviembre de 2011

Las nuevas 7 Maravillas de la Narturaleza miran hacia el sur



Acaba de hacerse público el resultado de la votación sobre las nuevas 7 Maravillas de la Naturaleza: Amazonas, Bahía de Halong, Cataratas de Iguazú, isla Jeju, Komodo, Río subterráneo Puerto Princesa y Table Mountain, por orden alfabético.



Como veis variadita sí que está la cosa. Variada y repartida, aunque con marcada mayor presencia oriental, en especial el Sureste Asiático, y clara tendencia al Hemisferio Sur. Por continentes: América del Sur (2), Asia (2), África (1), Oceanía (2 que están en realidad a medio camino entre el Sureste Asiático y Oceanía).



Por países: Amazonas (Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guayana Francesa, Guyana, Perú, Surinam, Venezuela), Bahía de Halong (Vietnam), Cataratas Iguazú (Argentina, Brasil), Isla Jeju (Korea del Sur), Komodo (Indonesia), Río Subterráneo Puerto Princesa (Filipinas) y la Montaña de la Mesa (Sudáfrica).



No coincide con mi lista personal (tres de ellas si, de las que os dejo pistas fotográficas) pero ya se sabe que este listado tiene mucho que ver con la promoción y comunicación local, criterios populares y gustos personales. Por populares me refiero no sólo a que no están sujetas a informes científicos y la riqueza de sus recursos naturales, que a todas se les presupone, sino más bien a que han sido propuestas y elegidas de forma abierta y pública. Por el gusto popular, en definitiva. Llama la atención que sobre todo las votaciones se han efectuado por Internet y que las zonas donde más internautas hay, no se han visto recompensadas con ninguna ganadora.

Es cierto que hasta su proclamación oficial todavía puede haber alguna sorpresa y están catalogadas como nuevas 7 Maravillas Naturales de forma provisional.



Una reflexión personal para concluir. Si la designación de estos lugares supone salvaguardar sus recursos naturales fantástico, si por el contrario la masificación se convierte en su principal amenaza, entonces me alegro de que muchos de mis lugares preferidos (algunos entre los 28 finalistas y otros no) se hayan quedado sin “premio”.



Esperemos además que sirva para girar los ojos del mundo hacia la importancia de la Naturaleza y, de forma especial, de quienes tiene poder para protegerla. Que sirvan para sus conservar ecosistemas y especies.


viernes, 11 de noviembre de 2011

El “Gran Cañón” de Arabia

El Gran Cañón de Arabia tiene abismos de más de 1.000 metros de profundidad.

Está en Omán y se llama Wadi Ghul. Aspecto absolutamente imponente, este profundo cañón alcanza profundidades que llegan a los 1.000 metros de desnivel (nada que envidiar al Colca peruano o al Gran Cañón del Colorado) desde la máxima altura del país omaní, los 3.075 metros del Jebel Shams (pico del Sol), en las montañas de Al Hajar, a 240 kilómetros de la capital Muscat.

Al borde del abismo.


Hace años que lo descubrí y he de reconocer que no me esperaba semejante monumentalidad geológica. Aguardaba una gran garganta al noreste del país en el desierto pedregoso, cerca de las casas de adobe de Al Hamra (no lejos de Nizwa), pero cuando remontamos por la pista de tierra el wadi Ghul hasta el altiplano desde donde se asoman los diferentes miradores al abismo de este cañón, me quedé estupefacto. Durante la subida no se tiene referencia real del desnivel al que nos vamos a asomar hasta que uno no está arriba… y se asoma.
Imponente imagen del Wadi Ghul.



Una serie de miradores permite tomar diferentes perspectivas de este angosto cañón de la península Arábiga. Se enlazan fácilmente por la pista de tierra que recorre el borde superior del cañón o también a pie por el aéreo sendero que hace lo propio con quienes deciden dar un paseo por el abismo. De sombra nada de nada, sólo alguna pequeña estructura a modo de tenderete en algún contado mirador, así que mejor llevad protección solar y un buen sombrero para disfrutar con calma y como se merece el Gran Cañón de Arabia. El calor no es excesivo gracias a la altitud (20ºC en verano y 0ºC en invierno).
Panorámica desde las faldas del jebel Shams, a 3.000 metros de altitud.


Se aacede en vehículo hasta la parte alta del cañón.

Las montañas de Al Hajar surgieron hace 60-100 millones de años originadas por plegamientos de terrestres al chocar las placas euroasiática y arábiga. En el altiplano proliferan los fósiles marinos que los niños de las aldeas más próximas no dudarán en mostrarte y venderte. También por cierto unas curiosas zapatillas hechas con pelo de las abundantes cabras domésticas.

El guía me explica las dimensiones del cañón.

El autor viendo fóslies en compañía de los guías más "expertos".

En los diferentes pliegues del desfiladero se observan numerosas formaciones de roca, tan caprichosas, esculpidas por viento y lluvias, como variables en color. El paisaje actual de la garganta responde al modelado kárstico del cuaternario, bastante joven pues. Uno de los paisajes más espectaculares del planeta.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Avistamiento de cetáceos en el mar de Arabia

Frente a las costas de Omán se concentran grupos enormes de delfines.

El mar de Arabia está formado por las aguas del Océano Índico que bañan las costas de la Península Arábiga por su parte sur y este (el oeste lo baña el Mar Rojo). El límite inferior de este mar los marcan las costas africanas de Somalia, en el cuerno de África, y el Golfo de Adén y sube hasta tocar las playas de Irán y Pakistán, quedando cerrado al este por la Península de India.



Hechas las presentaciones contaros que Omán, puerta de entrada al Golfo Pérsico, es un excelente punto de partida para la observación de fauna marina. Son aguas templadas que permiten la vida de miles de especies de peces y mamíferos marinos (desde varias especies de delfines hasta ballena azul) que se concentran especialmente cerca de las costas, donde la temperatura del agua es todavía más agradable y abunda la comida. Precisamente siguiendo esta comida en forma de enormes bancos de peces han hecho de estas aguas costeras su morada habitual un gran número de cetáceos (hasta veintiuna especies diferentes) que acuden fieles a la cita diaria con los pescadores omaníes que levantan redes a primera hora de la mañana.

Se aproximan mucho a la embarcación y pasan buen rato jugando.


Si queremos verlos hay que estar pronto, con las primeras horas de luz, pero a cambio seremos recompensados, sólo en lo que a delfines se refiere, con varios miles de ejemplares ante nosotros. Y lo de varios miles no es una exageración. Acostumbrado a la presencia y observación de cetáceos, he de confesar que jamás había presenciado tal concentración de estos cetáceos. Los delfines (nariz de botella, común, spiner y de Rissos), una vez satisfechos de su ración alimenticia correspondiente de pequeños atunes, sardinas, etc. no dudan en jugar a ambos lados de la embarcación durante el tiempo que haga falta, hasta que el jefe de la manada lo estime oportuno. Acercándonos a las pequeñas embarcaciones pesqueras para charlar y comentar cómo ha ido la jornada, podremos contemplar además capturas interesantes como varias especies de tiburones o pequeños atunes sobre la cubierta del bote.





Algunas recomendaciones para vivir esta experiencia desde el puerto de Muscat: en cuanto a empresas de whale watching Sidab Sea Tours y Arabian Sea Safaris.

Los meses más recomendables son los que van entre octubre y marzo, cuando no hay monzones y las temperaturas son de 20-25ºC. En verano las temperaturas pueden llegar a los 48ºC y están siempre por encima de los 30º.

Las salidas son muy temprano (7-8 de la mañana) y duran 2-3 horas así que hay que estar dispuesto a madrugar. Crema protectora, prismáticos (aunque la proximidad hará que casi no los utilicemos, nunca se sabe qué animal podemos avistar a mayor distancia del bote). También la oportunidad de realizar la salida en un Dhow, la embarcación local, e incluso realizar snorkelling con los delfines.